Mía, la mujer mía
Mía, aquella mujer de mi vida
llegó sin darme cuenta un día.
De su llegada aun yo recuerdo
fue un Hola y pronta despedida
dejándome loco y boquiabierto
perplejo
mas luego volvió; le seguí atento
sentarse fémina en una esquina.
Mía, desde ese día, amada mía
no dejaré se vaya de mi vida.
De aquella noche que la quiero
la quiero por entera y solo mía.
No nos separen cielos o avernos
no se pierda como en un sueño
un recuerdo;
mujer mía se quedará en mi vida.
Mía, Mía, Mía majaderamente mía
no son obsesiones, tan solo mía..
así la quiero.
::: Cristtoff WOLFtown © :::
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